El partido de la jornada 32 de
liga se empezó a jugar, cuando los jugadores del Granada regresaban de Madrid (de
perder 5-0 con el Atl. de Madrid) y eran recibidos por 25 miembros del grupo,
mostrando todo nuestro apoyo bajo el lema: Nuestra pasión por el Granada CF no
entiende de victorias o derrotas.
Así toda la semana previa al
partido contra el Real Valladolid comenzaban los preparativos y el llamamiento
a la afición;
Decenas de bolsas de papelitos,
centenares de rollos de papel, estandartes, banderas de mano, la pancarta,
llamamiento masivo a la afición rojiblanca para el recibimiento… mucho trabajo
que durante la semana y con el trabajo desinteresado de muchos integrantes del
grupo fue haciéndose realidad poco a poco.
Llegaba el sábado, y pese el
horario del partido (16 h) la afición se congregaba a medio día en torno al
estadio para calentar motores. Durante el recibimiento y la previa del partido
Sección Kolokón se encargaba de dar el toque de fiesta y los ánimos que el
equipo necesitaba. Sin embargo y sin que fuera muy sonado, 4 integrantes del grupo
eran sancionados por portar botes de humo. A.C.A.B.
Llegada la hora del partido, en
el himno del 80 aniversario del GCF, Sección Kolokón desplegaba la pancarta:
GRANADA NO SE RINDE.
Durante el partido todo el
estadio rugía, pero en especial el fondo sur, que fue, como siempre, el motor
de Los Cármenes.
Un 10 a toda la afición
rojiblanca, que aunque muy sufridora, sabe responder cuando el equipo lo
necesita. Este es el camino a seguir.
Deportivamente el Granada CF dominó
durante los 90 minutos. El empuje del equipo no se hizo esperar y, desde el
pitido inicial, los rojiblancos se empeñaron en buscar el partido de la mano de
la afición, que no dejó ni un segundo de animar.
Ya en el minuto 9, El Arabi, sin duda uno de los hombres del partido, cabeceó un buen centro de Nyom que Jaime despejó a córner. Sacó Nolito y de nuevo el delantero marroquí remataría, esta vez ligeramente alto. El meta de Ciudad Real sería otro de los protagonistas al detener numerosos disparos de los locales.
Pocos minutos después Ighalo y
Mikel Rico probaron al guardameta desde la frontal del área, ambos disparos
despejados por el portero visitante. A cinco minutos del descanso El Arabi
volvió a intentarlo con un disparo cruzado que se marchó fuera.
Con el empate en el marcador se
llegó al descanso. En la reanudación, Diakhaté realizó una falta cuando Larsson
se iba en el uno contra uno hacia Roberto. Ebert ejecutó una falta extraordinaria
a la que Roberto no pudo llegar. 0-1.
Alcaraz puso en juego a
Buonanotte y Aranda que dieron un aire nuevo al conjunto local. De las botas
del primero llegó un centro excepcional que El Arabi cabeceó a la red. 1-1.
El equipo se volcó en el ataque
teniendo más ocasiones por parte de los atacantes. Un derroche de juego que
deja al Granada con un aire renovado y mucha esperanza en conseguir la
permanencia.